Unió Mallorquina y PP balear: La Política al servicio del poder y los Negocios. Los Negocios al Servicio de la Política y el Poder.
El presente estudio pretende profundizar en la corrupción Balear, concretamente la protagonizada por los gobiernos de los partidos que de más casos de corrupción han sido objeto de investigación e imputación de sus miembros y dirigentes en toda la etapa democrática: Unió Mallorquina (UM) y PP Balear. Puesto que ha sido en coalición de dichas formaciones cuando, presuntamente o de facto, se cometieron mayor número de acciones ilícitas por funcionarios y políticos de ambos partidos, los ejemplos prácticos y reales que puedan describir que aspectos y causas Micro (individuales) y/o Macro (sistémicas/estructurales) que han llevado a que la legislatura 2003-2007 sea recordada como la legislatura más corrupta de la historia de las Illes Balears y posiblemente una de las más corruptas del Estado Español en cuanto a número y relevancia de los cargos que ostentaban los imputados, son muchos.
· “Unió Mallorquina (en anagrama, UM) és un partit polític nacionalista, que se declara hereu del mallorquinisme polític entès com la tradició històrica del pensament polític mallorquinista, i amb vocació de centralitat. Es defineix com a democràtic, participatiu, plural, aconfessional, humanista, d’ideologia liberal i de caràcter centrista, i té com a objectiu polític fonamental el progrés de la societat, desenvolupament integral i el benestar de les persones a partir de la llibertat, l’equilibri social, la justícia, i la solidaritat.”[1]
· “El Partido Popular se define como una formación política de centro reformista al servicio de los intereses generales de España, que tiene a la persona como eje de su acción política y el progreso social como uno de sus objetivos. Con clara vocación europea e inspirado en los valores de la libertad, la democracia, la tolerancia y el humanismo cristiano de tradición occidental, defiende la dignidad del ser humano y los derechos y libertades que le son inherentes; propugna la democracia y el Estado de Derecho como base de la convivencia pluralista en libertad; promueve, dentro de una economía de mercado, la solidaridad territorial, la modernización y la cohesión social así como la igualdad de oportunidades y el protagonismo de la sociedad a través de la participación de los ciudadanos en la vida política; aboga por una comunidad internacional fundamentada en la paz y en el universal respeto de los derechos humanos.”[2]
· “Si partimos de la propuesta por Heindenheimer en 1989, y más o menos recogida por la Convención de la ONU que sobre esta materia se celebró en 2003, se considera que existe <corrupción> “cuando alguien que detenta el poder encargado de ciertas cosas es inducido mediante recompensas monetarias o de otro tipo a realizar acciones que favorecen a quien ofrece la recompensa y en consecuencia daña al grupo o a la organización a la que el funcionario pertenece”. … … Esa misma Convención de la ONU distinguía once tipos de delitos de corrupción: soborno de funcionarios públicos nacionales; de extranjeros y de organizaciones internacionales públicas; malversación y apropiación indebida por funcionario público; tráfico de influencias; abuso de funciones; enriquecimiento ilícito; soborno en el sector privado; malversación en el sector privado; blanqueo del objeto del delito; encubrimiento, y obstrucción de la justicia”[3]
Unió Mallorquina(UM) se presentó a unas elecciones por primera vez en 1983, concretamente a las primeras elecciones municipales y autonómicas de la democracia española. Su fundador Jeroni Albertí, fue el presidente de la UCD en las Illes Balears hasta el momento de la escisión de dicho partido en UCD y UM, ante la cual, Albertí decidió aunar las ideas centro-liberales a las de un regionalismo proteccionista y nacionalista. En dichos comicios la representación de este partido heredero/escindido de la UCD balear y que fue paralelo al vestigio que quedó de dicha formación hasta su total desapariciónen las Illes Balears, obtuvo un resultado cercano al 19% de los votos emitidos, lo que la situaba como tercera fuerza política de las baleares y un elemento decisivo en la cámara de representación autonómica para garantizar la gobernabilidad de las instituciones. Los dos partidos mayoritarios que le superaron en votos fueron el PSOE y la coalición de partidos de derechas AP-PDP-UL, antecesora del actual Partido Popular (PP). El presidente de ese PP balear hasta 1995, Gabriel Cañellas Fons, dio a su partido un aire regionalista moderado que se ganó la simpatía desde los liberarles nacionalistas hasta la derecha tradicional. Con dichas circunstancias consiguió pactar con el presidente de UM cediendo a éste la presidencia del Consell de Mallorca. Desde ese momento UM no ha dejado de estar en las instituciones autonómicas e insulares más importantes hasta que en febrero de 2010, el presidente de la comunidad autónoma, Francesc Antich (PSIB-PSOE), decide romper el pacto que mantenía con tal formación tras explotar el caso ‘Voltor’, en que se investigan hechos de la presente legislatura y que implica a altos cargos de UM que formaban parte del Govern Balear.
Elecciones 1983 en Mallorca
Desde ese instante (1983) hasta la actualidad UM se ha convertido en una de las fuerzas decisivas en la gobernabilidad de las Illes Balears. De los 27 años de democracia autonómica balear 21 de ellos han estado gobernados por el PP y UM, estos últimos han tenido presencia durante 25, ya que también gobernaron mediante pacto en coalición con PSOE y BLOC entre 1999 y 2003. Es destacable por tanto el que dicha formación haya estado presente en todos los gobiernos autonómicos de la etapa democrática y que el PP solo haya cedido 8 años de gobierno en cómputo legislativo. Este hecho es una variable importante a tener en cuenta en una de las hipótesis centrales de este estudio: la instauración/dilatación temporal en el poder de estos partidos en los sucesivos gobiernos de les Illes Balears provocó una acumulación de poder en algunos individuos o grupos que tuvieron como consecuencia una tendencia a acomodarse en tipos de conductas no adecuadas e ilícitas que anteponían los intereses personales a los idealmente políticos. Si tenemos en cuenta que la capacidad legislativo-ejecutiva autonómica e insular balear reside en la cámara parlamentaria y en el Consell de Mallorca, y vistos los datos cronológicos y la escasa alternancia de partidos en dichas cámaras, aquellos individuos que fueron atraídos hacia la praxis política en pos de otro tipo de búsqueda de beneficios que los puramente políticos, poseerían durante un dilatado periodo de tiempo de las herramientas necesarias no solo para enriquecerse ilícitamente, sino también para poder enterrar/ocultar/prolongar dichas acciones mediante estrategias de amplia gama, entre las que teóricamente se pueden encontrar: modificación de leyes, dificultar/no-propiciar posibles investigaciones i/o comisiones de investigación, retrasando dichas investigaciones o, dejarlas ‘morir’ en el juzgado, caso, este último, del cual se tiene como inmejorable ejemplo al ‘Caso Túnel de Sóller’.
El ‘Caso Túnel de Sóller’ fue el primer gran caso de corrupción de las Illes Balears y a la vez el primer gran caso de corrupción en España del PP estatal afectando directamente al presidente de las Islas Baleares, Gabriel Cañellas, el cual tuvo que dimitir por orden directa de José María Aznar, puesto que este tenía como estrategia principal en su campaña de oposición el acoso al gobierno de Felipe González por los casos de corrupción del PSOE. Si bien en tal caso no se vio afectado ningún miembro de UM, sí que ilustra el inicio de la dinámica que se ha hecho evidente en el actual momento histórico que afecta a PP y UM o que eclosiono estrepitosamente en la legislatura 2003-2007.
Los hechos del ‘Caso Túnel de Sóller’ consistieron en la adjudicación irregular de las obras de construcción del Túnel de Sóller a Antoni Cuart, un empresario socio del presidente Gabriel Cañellas y el pago de éste de unos 50 millones de pesetas (300.000 €) a la Fundació Illes Balears, presidida por Gabriel Cañellas y al mismo PP, para sufragar los gastos de las campañas electorales de 1989 y 1991. El proceso se inició el 7 de abril de 1995 cuando Eberhard Grosske (IU) denunció al presidente y al consejero de obras públicas del Gobierno balear, Gabriel Cañellas y Bartomeu Reus, y al exconsejero Jeroni Saiz, por supuesta prevaricación continuada en la adjudicación de las obras del túnel de Sóller a la empresa de Antoni Cuart. El candidato del PP a la presidencia del Gobierno Central en aquel momento, José María Aznar, obligó a Gabriel Cañellas a dimitir para dar una imagen de transparencia y asunción de responsabilidades. Lo substituyó en el cargo Cristòfol Soler. Al año siguiente, Jaume Matas Palou, a través de medios colusivos(es decir, en la sombra y bajo estrategias oscuras y conspiradoras), algo que ya dejaba entrever su metodología, arrebató la presidencia del PP balear a su antecesor en el momento en el que se tenían que celebrar nuevas elecciones municipales y autonómicas. El propio Soler denunció la deslealtad de Jaume Matas públicamente. La sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Baleares de julio de 1997 cerró el caso declarando probadas las acusaciones pero los acusados quedaron absueltos por la prescripción del delito. Cabe recordar que actores políticos en pleno ejercicio de sus cargos en el 2010, como Maria Salom, actual candidata a presidir el Consell de Mallorca, y actualmente diputada del parlamento español, fueron interrogados por diversas actuaciones probadas en el sumario de tal caso. Concretamente a Maria Salom se la investigó por los ingresos en su cuenta nominal bancaria de los sobornos probados que realizaron los empresarios implicados.
La estadística no se puede ser más clarificadora. De la corrupción detectada en las Illes Balears existe una especial concentración de corrupción en PP y UM, partidos que, curiosamente, han ostentado el poder de forma conjunta tanto en el Govern de les Illes Balears como en el Consell de Mallorca cuando se produjeron la mayor parte de los casos de corrupción estudiados excepto el caso Voltor. Es notable también que en legislaturas anteriores ya se emitieran sentencias condenatorias por delitos electorales y de corrupción que afectaron a dichos partidos o miembros de dichas formaciones y que no les afectaron electoralmente, algo que reforzaba la posición de los corruptos al no ver repercutido en sus actos probados o posibles, ‘pago’ electoral en sus acciones.
En lo que se refiere a UM, cabe decir que su objetivo ha sido siempre el de poder presidir el Consell de Mallorca o al menos estar al cargo de carteras relevantes dentro de éste. Los diferentes Consells Insulars tienen competencias propias de gestión tan importantes como la ordenación del territorio o la gestión, construcción y mantenimiento de las carreteras. Estos dos campos suelen ser ‘dianas’ comunes de la corrupción política en general por sus pingües beneficios a corto plazo, la facilidad de poder manipular proyectos y procesos concursales (haciendo por ejemplo, ‘trajes a medida’ en los procesos concursales) desde su inicio al igual que deformar datos, inflar facturas, demandar estudios de dudosa eficacia/utilidad… También las áreas relacionadas con turismo, concretamente con su promoción, ya fuesen las propias carteras de turismo en Govern y Consell, ya fuese mediante direcciones generales, consorcios u oficinas de promoción turística, han sido objeto de la acción de los corruptos. El motivo es obvio: la amplia gama de contratos menores que pueden realizarse para la promoción turística como campañas de publicidad, ferias, merchandasing etc, que además, pueden ver fraccionadas sus facturas y asignarse sin concurso, dificultan la percepción e investigación de que se pueda estar cometiendo cualquier tipo de actividad ilícita. No se ha de olvidar, dentro de los blancos comunes de la corrupción a las carteras de industria y el comercio que también se han visto comprometidas.
A esto se une otro factor importante propio del marco físico de las Illes Balears, el ser un archipiélago, y no un archipiélago cualquiera, sino el que dio nombre a la sobredimensión de la construcción insostenible que se refleja en la urbanización salvaje, la ‘Balearización’, termino clásico de las escuelas de economía i turismo a nivel mundial y que no es más que el proceso desarrollista que provocó la construcción sobre la misma orilla del mar a favor del negocio del turismo en un territorio limitado. Esta última variable condiciona que la posibilidad de acceder a los beneficios que el territorio genera mediante su venta, construcción o regulación rural, urbanística, de interés… sea más atractivo en cuanto que el coste del suelo es mayor al igual que lo es la realización de obras. En consecuencia, la realización de actividades ilícitas será a la vez más rentable y falseable.
De los políticos imputados en diferentes causas en las Illes Balears, me referiré a los más relevantes o aquellos que se han visto implicados en los casos más importantes en el momento de realización del presente estudio (2010). La lista, aun siendo larga, da cuenta detallada de los ‘cabecillas’ de las diferentes tramas investigadas por la fiscalía. De las decenas de cargos de primera línea que abajo expongo se han de llegar a los 500 imputados que están inmersos en las diversas causas, 140 única y exclusivamente en el ‘Caso Andratx’, y sirve para sustentar otra de las tesis del presente estudio, que la corrupción puede concretarse en acciones individuales o colectivas que pueden llegar a generalizar y sistematizar en la estructura del sistema con una progresiva disminución de la percepción del riesgo por parte de los actores de la corrupción entretejiendo una red sutil pero que se llega a extender normalizando y banalizando dichas conductas, dando cabida a lo largo del tiempo, a más individuos que anteponen a la ideología los intereses particulares.
Jaume Matas Palou (PP): Expresidente de las Illes Balears, consejero de hacienda en los gobiernos de Gabriel Cañellas y presidente del PP desde la dimisión de Cañellas y su sucesor, Cristofol Soler, se le investiga por el presunto desvío de más de 50 millones de euros públicos durante la construcción del velódromo Palma Arena, por presunto enriquecimiento ilícito y por financiación irregular del Partido Popular. Se le ha impuesto una fianza de 3.000.000€ y ha admitido públicamente que defraudó a hacienda en su trayectoria como consejero de hacienda y como presidente para intentar justificar su exultante patrimonio y su tren de vida.
Maria Antònia Munar (UM): Presidenta de UM tras Jeroni Albertí hasta la presente legislatura en la que dejó la presidencia del partido en manos de Miquel Nadal. Presidenta del Consell de Mallorca en la pasada legislatura, pasó a Presidir el Parlament de les Illes Balears, como condición para formalizar el pacto de Gobernabilidad con Psoe y Bloc, en lo que todos los medios calificaron como una ‘retirada con honores’ al presidir la más alta institución de las Illes Balears. Forzada a dimitir de tal cargo tras salir a la luz el caso ‘Maquillatge’,en el que presuntamente se financió ilegalmente UM y se amañaron adjudicaciones a empresas, alguna de ellas bajo la sospecha de pertenecer a testaferros. Se le ha retirado el pasaporte y se le ha impuesto una fianza de 350.000€. Ha sido acusada de seis delitos, entre ellos malversación, delito electoral y cohecho. Además está imputada en un caso anterior, el caso ‘Can Domenge’ que investiga el trato de favor a una empresa constructora a la que le vendió por 30.000.000€ unos terrenos urbanizables del Consell de Mallorca en el centro de la capital balear por los cuales otra empresa que concursaba por los mismos terrenos ofertaba el doble, exactamente 60.000.000€.
Miquel Nadal (UM): Ex Presidente de UM sucesor de Maria Antònia Munar, tuvo que dimitir de su cargo dentro del partido poco tiempo después de ser nombrado y dimitió también su puesto en el Govern Balear como Conseller de Turisme, y como teniente de alcalde del ayuntamiento de Palma. Se le acusa de sufragar su campaña electoral en Palma con fondos del Consell de Mallorca. También encausado en la operación Voltor y en el caso Can Domenge. Se le ha retirado el pasaporte y se le ha impuesto varias fianzas que suman un total de 600.000€.
Miquel Angel Flaquer (UM): Ex Presidente de UM, sucesor de Miquel Nadal y ex Conseller d’Economia del Consell de Mallorca, está imputado por el caso Can Domenge y por la operación Voltor, que investiga una red de UM para beneficiar a empresas afines. En libertad bajo fianza.
Antonio Ramis de Ayreflor (PP): Ex Consejero de Hacienda del gobierno Matas (2003-2007), está imputado por el caso Bomsai en el que se investigan desvió de fondos y sobornos relacionados con diferentes proyectos como la construcción del parque de bomberos de Palma que quintuplicó su presupuesto inicial.
Bartolomeu Vicens (UM): Condenado a 4 años y medio por malversación de fondos públicos. Exconsejero insular de Ordenación del Territorio de UM está imputado en varios casos –Son Oms, Can Domenge y Plan Territorial. Ha sido el primer parlamentario de les Illes Balears en ingresar en prisión condenado por delitos de corrupción.
José Juan Cardona (PP): Consejero de Comercio e Industria del anterior gobierno del PP. Está imputado por el ‘Caso Scala’ por el que dimitió como parlamentario de la cámara balear. El ‘Caso Scala’ es un presunto entramado de corrupción en el consorcio CDEIB que se dedicaba a adjudicar concursos amañados a empresas afines. También se sospecha que fondos y recursos de tal consorcio se destinaron a la campaña electoral del PP facturándose bajo el nombre de ‘Producto Estrella’.
Antònia Ordinas (PP): Durante años mujer de confianza de Jaume Matas al frente del CDEIB. Imputada por el ‘Caso Scala’ Ha confesado que se apropió de más de 200.000€ públicos que enterró en una lata de Cola-Cao en su jardín.
Kurt Viaene (PP): Ex director general de Promoción industrial del Govern del PP. Imputado por el ‘Caso Scala’. Se le acusa de cobrar comisiones y de dirigir una trama para el desvío de fondos públicos del CDEIB.
Francesc Buils (UM): Ex consejero de turismo del Govern Balear. Se le acusa de haber amañado concursos públicos previo cobro de comisiones.
Miquel Àngel Grimalt (UM): Ex conejero de medio ambiente del Consell Insular de Mallorca. Imputado por el caso ‘Maquillaje’.
Antonio Pascual (UM): Ex consejero del Consell de Mallorca de carreteras y obras públicas, imputado por cobro de comisiones y amaño de concursos.
Maximiliano Morales (UM): Acusado de haber cobrado comisiones a cambio de lograr que se recalificara el actual polígono de Son Oms, en Palma.
Antoni Oliver (UM): Imputado en el ‘Caso Voltor’. El ex alto cargo de UM en la Consejería de Turismo está acusado de conceder contratos a empresarios afines a su partido.
Rodrigo de Santos (PP): Condenado a 2 años por malversar más de 53.000 euros públicos en prostíbulos y a 13 años y medio por abuso sexual de menores. Fue el máximo responsable del Urbanismo de Palma y teniente de alcalde del PP.
Eugenio Hidalgo (PP): Ex alcalde de Andratx, Guardia Civil retirado, condenado a 4 años de cárcel por las piezas que ya han sido juzgadas. El ‘caso Andratx’, dividido en más de sesenta piezas diferentes, investiga delitos urbanísticos continuados en los que están implicados miembros de este ayuntamiento y del gobierno Matas (2003-2007).
Jaume Massot (PP): Condenado 3 años y medio por delito de prevaricación y urbanístico por el ‘Caso Andratx’. Máxima autoridad urbanística de Balears en el gobierno Matas (2003-2007) .
Lluc Tomas (PP): Alcalde de Llucmajor en el momento de la sentencia. Condenado a 3 años de cárcel y 8 de inhabilitación por consentir el desvío de un millón de euros del Ayuntamiento a su edil Joaquín Rabasco del partido independiente ASI, en coalición con el PP.
Joaquín Rabasco ( IND-ASI): Condenado a 6 años de prisión y 8 de inhabilitación. El ex concejal y ex Policía Nacional Presidente de ASI, un partido de extrema derecha está condenado, al igual que su pareja, María del Mar Aldao y el Alcalde de Llucmajor Lluc Tomás por desvío de capital a un entramado de empresas.
Damià Vidal (PP): - Gerente BITEL govern de Matas Caso Bitel II. La policía le detuvo por presunta malversación de 700.000 euros públicos.
Miquel À. Bonet (PP): ‘Caso Ibatur’. Estuvo al frente del Instituto balear de Turismo (Ibatur) con el PP y UM. Acusado de emitir facturas falsas a nombre de familiares suyos.
Xico Tarres (PSIB-PSOE): Presidente del Consell de Ibiza y diputado del PSOE, investigado por el ‘Caso Ibiza centro’. Acusado por su predecesor de participar en una trama de financiación irregular de su partido, desvelada antes de las últimas elecciones.
Marina Sans (PP): ‘Caso Funeraria’. La ex presidenta de la funeraria municipal de Palma cargó a cuenta de la institución municipal viajes particulares de su familia.
Rafael Durán (PP): Ex concejal del PP en Palma. Imputado por el ‘Caso Palma Arena’. Formaba parte del consorcio para la construcción del velódromo que duplicó su coste.
Pedro Àlvarez (PP): ‘Caso Palma Arena’. Consejero del PP en la oposición en el Consell de Mallorca, participó durante su etapa como concejal del Ayuntamiento de Palma en la pasada legislatura en la construcción del velódromo.
Antoni Serra (PP): Diputado del PP en el Parlamento balear y miembro del consorcio para la construcción del Palma Arena. Imputado por la causa del mismo nombre.
‘Pepote’ Ballester (PP): El medallista olímpico (Oro en Vela en Barcelona 92) y Ex director general de Deportes está imputado por el ‘Caso Palma Arena’.
Antoni Oliver (UM): Imputado en el ‘Caso Voltor’. El ex alto cargo de UM en la Consejería de Turismo está acusado de conceder contratos a empresarios afines a su partido.
Joan Sastre (UM): ‘Caso Voltor’. Ex director general de Promoción turística se le imputan los delitos de prevaricación, cohecho y malversación de caudales públicos, al igual que sus compañeros de UM Joan Flaquer, Antoni Oliver, Álvaro Llompart y Antoni Rebassa.
Juan F. Gálvez, Damià Amengual y Francisco Gosálbez (PP): ‘Caso Turismo Joven’. En la pasada legislatura J.F. Gálvez fue el Director General de Juventud del Govern del PP. Está acusado junto a Francisco Gosálbez y Damià Amengual del desvío de fondos del ente público para fines privados.
Gonzalo Aguiar (UM): ‘Caso Carretera de Manacor’. Ex Director Insular de Carreteras, está imputado por la Fiscalía bajo sospecha de que se hincharon facturas y hubo pago de comisiones en las obras del mimo nombre.
Jorge Mandado (UM): Ex presidente de la Fundación Illes Esport, presidente de la Casa Argentina, está siendo investigado por un supuesto delito electoral de compra de votos a cambio de puestos de trabajo y dinero.
La lista de imputados es mucho más larga (500). En esta muestra no obstante se observa la relevancia de algunos de los imputados que ostentaban cargos públicos y la gravedad de los delitos de que se les acusa. Es curioso que la mayoría de ellos pertenezcan a la pasada legislatura, pero que ya tuvieron responsabilidades en el primer gobierno Matas-Munar de 1995/1999. Si bien el primer gobierno Antich supuso un paréntesis de actividad de uno de estos dos partidos, lo fue únicamente en el Govern en el que el PP perdió la presidencia gracias a que UM, a cambio de seguir manejando las mismas áreas de poder en Govern y mantener la presidencia en el Consell de Mallorca, cedió el poder del Govern en la legislatura 1999-2003 al PSOE por primera vez en la historia de las Illes Balears. En el siguiente listado expongo los diferentes presidentes de las instituciones de las Balears desde el inicio de la etapa autonómica.
Presidencias del Govern Balear
- Gabriel Cañellas Fons PP (1983-1995)
- Cristòfol Soler Cladera PP (1995-1996)
- Jaume Matas Palou PP (1996-1999)
- Francesc Antich Oliver PSOE (1999-2003)
- Jaume Matas Palou PP (2003-2007)
- Francesc Antich Oliver PSIB-PSOE (2007-actualidad)
Presidencias del Consell de Mallorca
· Jeroni Albertí i Picornell UM (1983-1987)
· Joan Verger i Pocoví PP (1987-1995)
· Maria Antònia Munar i Riutort UM (1995-2007)
· Francina Armengol i Socias PSIB-PSOE (2007- actualidad)
Queda claro, por evidencia empírica, que el sustrato temporal como variable independiente del presente estudio de caso ha sido relevante por las causas anteriormente mencionadas. Desde el análisis de las causas, podemos afirmar además, algunas otras que pueden ser también relevantes. Samuel P. Huntington en su libro “Modernization and Development” señala las siguientes:
-La corrupción tiende a incrementarse en un período de rápido crecimiento y modernización, debido a los cambios de los valores, las nuevas fuentes de riqueza y poder, y la ampliación del gobierno.
-Tiende a existir menos corrupción en los países con más estratificación social, más polarización de clases, y más tendencias feudales. Estas condiciones proporcionan un sistema más claro de normas y sanciones, que reduce tanto las oportunidades como las atracciones de la conducta corrupta.
-La relación entre oportunidades políticas y económicas de un país influye en la índole de la corrupción. Si las primeras superan a las segundas, entonces la gente se dedicará a la política para ganar dinero y esto provocará una mayor difusión de la corrupción.
-Cuando predominan los negocios con el extranjero, la corrupción tiende a promoverse.
-Cuando menos desarrollados son los partidos políticos, es más frecuente la corrupción.”[4]
Los apartados marcados en negrita podrían ser los más coincidentes con el caso que nos atañe, el de la corrupción de las Illes Balears por parte de de PP-UM/ gobiernos Matas-Munar. No obstante la perspectiva de Huntington está ligada a un tipo de concepción sistémica dentro de la Perspectiva Funcionalista de las relaciones de desarrollo de las naciones y es excesivamente funcionalista en cuanto que de sus argumentos se desprende que son los países en vías de desarrollo los que parecen tener una mayor predisposición a la corrupción y que esta cumple una función dentro del propio desarrollo económico de una región. Implícitamente presupone que es la falta de desarrollo económico o el proceso de desarrollo económico lo que propicia tal hecho, y aunque define aspectos estructurales que sí pueden tenerse en cuenta a la hora de analizar las causas de la corrupción, está ampliamente documentado que en condiciones diferentes a las que describe en los puntos anteriores la corrupción se da igualmente, o sea, que los países del capitalismo avanzado y sus regiones, caso de las Illes Balears, tampoco están, como se ha visto, fuera de peligro.
No obstante, tales disquisiciones nos llevan a pensar que tipo de ‘cultura política’ es la que ha propiciado la corrupción Balear. Desde una perspectiva totalmente moralista, a saber, la teoría por la cual la corrupción la cometen actores individuales moramente reprobables o atraídos por recompensas ilícitas que no se corresponden con las ideológicas o legalmente políticas, tal magnitud y número de conductas sería difícil de explicar. No obstante, éste suele ser el argumento esgrimido por los partidos políticos sumidos en causas por corrupción con tal de poder desviar el foco de atención sobre los encausados y alejarlos del partido, sobre todo cuando tales conductas han parecido hacerse de forma sistemática y paralela en diversos organismos por actores de muy diversa jerarquía dentro del Govern Balear y Consell de Mallorca. Recordemos de nuevo: la Teoría Moralista afirmaba que la corrupción se explicaba por acciones moralmente reproblables de actores individuales y que dichas acciones eran perniciosas para el sistema. Pensar que dichas conductas son consecuencia exclusiva de la posición o ausencia de ética de los actores políticos o de los funcionarios es obviar que ha de haber una serie de circunstancias que posibiliten dichas acciones tales como el marco legal. Por un lado el marco legal ha de ser favorable, o lo que es lo mismo, que las leyes den pie a ambigüedades y procesos fuera del control de las propias leyes, o al menos que posibiliten interpretaciones y subterfugios afines a los deseos de quien corrompe o se pueda escapar de su acción/omisión; por otro, circunstancias estructurales tales como el momento histórico, el desarrollo económico (estadio en el que se encuentra la economía), la estructura del sistema político, la estructura burocrática, etc.
La Perspectiva funcionalista, mencionada y ejemplificada con una referencia a Huntington en la página anterior, como otro enfoque explicativo de la corrupción, aun siendo menos popular a la hora de intentar ‘limpiar el nombre’ de los partidos políticos, sí tiene en cuenta algunos de los factores que obvia la Teoría Moralista, pero es también deficitaria a nivel explicativo puesto que obvia las motivaciones y cálculos de los actores a la hora de tomar tal decisión y hace un análisis superfluo y positivo de la misma y se centra en procesos de desarrollo económico. Dicha teoría afirma que la corrupción es propia de procesos de crecimiento económico y tiene una función dentro del sistema o se sistematiza dentro de los gobiernos en diferentes ramas. Ejemplo de ello sería la corrupción italiana de los años 70/80 del s.XX e incluso algunos aspectos de la pasada legislatura y de los gobiernos de PP-UM. Teniendo en cuenta ambas posturas (Teoría Moralista y Perspectiva Funcionalista) Se ha de llegar a una tesis que vaya más allá de ambas posiciones. En palabras de Donatella Della Porta “Así pues, lo que les falta a ambas aproximaciones es un análisis de la interacción entre los aspectos micro (individuales) y los macro (estructurales) del fenómeno; un análisis que clarifique el paso de las condiciones estructurales previas al comportamiento individual. Con esta aportación trato de sugerir que, para comprender el nacimiento y la extensión de la corrupción, es necesario observar las características de los funcionarios que caen en las prácticas corruptas. Como observó Alessandro Pizzorno, la intermediación política en democracia debería orientarse, como norma, a descubrir las necesidades y deseos de los ciudadanos y proceder a una selección, a una formulación de objetivos a largo, medio y corto plazo, y a una explicación de por qué se toma una medida en concreto en lugar de otra. La carrera de un político estará motivada fundamentalmente por la búsqueda del reconocimiento público y las cualidades requeridas serán la capacidad de síntesis ideológica y la capacidad oratoria, ambas necesarias para las tareas que acabamos de mencionar. Cuando la corrupción contamina el sistema, las funciones desempeñadas, las capacidades específicas activadas, y las motivaciones de la carrera, se transforman. Si en la actividad de la intermediación política tradicional --entendida como descubrir, aunar y representar intereses --, la cualidad más necesaria es "la capacidad de generalizar las demandas particulares en términos ideológicos o programáticos, de manera que obtenga el mayor consenso posible, dentro de ciertos límites," (Pizzorno, 1992, 22), cuando se extiende la corrupción se necesitan diferentes tipos de capacidades. En estas situaciones, se difunde un tipo especial de funcionario público: el político de negocios así llamado porque "combina la mediación con los negocios (legales o ilegales), y, en general, la participación personal en actividades económicas, con la mediación política en el sentido tradicional" (Pizzorno, 1992, 24).”[5]
Ese ‘Político de Negocios’ del que habla la politóloga italiana ha sido el gran cambio político de las últimas décadas en las Illes Balears. A partir de la crisis de los partidos tradicionales en los años noventa, eficacia y eficiencia, criterios y valores indispensables para el capitalismo unido a la productividad y el beneficio, han suplantado los valores tradicionales políticos e ideológicos que se aunaban ‘teóricamente‘ en aplicar ideológicamente las demandas de la sociedad que se gobernaba. Al cambiar los valores, o sea, la ‘cultura política’, se ha ido requiriendo de una mayor presencia de tecnócratas y burócratas además de políticos ‘expertos en eficacia y eficiencia’, a saber ‘políticos de negocios’, se ha configurado esta nueva forma de darse del actor político en los ‘negocios políticos’, ten eficiente y eficaz en los legales como en los ilegales.
Sin ideología, además, la carga moral mucho menor, la culpa es menos, no se traiciona a nadie, se vive por la carrera propia dentro de la organización, y si la conducta se ha generalizado temporalmente y en número de ‘compañeros’ que actúan igual, dicha conducta se banaliza, se normaliza y el espectro de actividades a las que se liga dicho ‘Político de Negocios’ se amplía con mínimos costes y riesgos. La conducta y ejemplos de acción corroboran tal tesis. En un trabajo anterior en la misma línea que el actual escribí: “La ideología se ha convertido, de este modo, en un instrumento más de supervivencia del que se puede hacer uso, dependiendo del momento, de forma más o menos intensa. Estos hechos han provocado que tanto partidos políticos como asociaciones, sindicatos o grupos de presión se hayan profesionalizado y haya cambiado paulatinamente el perfil de sus dirigentes y sus estructuras. Los más validos son por consiguiente aquellos que permiten el mantenimiento de la oligarquía. Son más eficaces a la hora de mantener el poder y gestionar los recursos que de sus cuotas se derivan y permiten el fortalecimiento de la organización y la competencia con los otros grupos que desean lo mismo. Ser fieles al programa político, ser -Patriota de Partido- en el caso de los partidos o tomar medidas o decisiones sindicales que pueden ser incluso perjudiciales para los grupos sindicados se ha convertido en una posición que se adopta, o no, pensando en términos de conveniencia organizativa y posibilidad de crecimiento. Tal vez sea osado, pero las estructura de lucha y competencia entre partidos y grupos de poder se asemeja en demasía a la dinámica multinacional del capitalismo avanzado... …. si algo tienen en común las políticas de supervivencia es, como he dicho antes, el cambio del perfil de los gestores y la desideologización de los actores políticos. La consecuencia necesaria es por consiguiente que las personas que se involucran en las estructuras de los partidos buscan otros fines como es el de la propia supervivencia a través de la supervivencia de la estructura, y eso hace más atractivo y menos reprobable la adopción de estrategias, llamémoslas por nostalgia, no convencionalescolusivas) o ilegales>… … Que la corrupción se enquiste, no es por consiguiente consecuencia de las malas obras de un actor individual moralmente reprobable, tiene que ver con la estructura del propio modo de darse de la política, politica’ que esgrimen sus actores>… …”[6]
No es baladí que las declaraciones de los actores políticos involucrados en procesos de corrupción en les Illes Balears vayan por la senda de, como afirmaba Bartolomeu Vicens, encarcelado por adjudicar un estudio a dedo a un colaborador y copiarlo directamente de una página de internet, de que su forma de actuar en la asignación de contratos era la habitual o que el Expresident del Govern, Jaume Matas, en una entrevista televisiva de la cadena pública-autonómica IB3 afirmase ”¡puñetas, dábamos puestos de trabajo!” cuando era preguntado por los escándalos relacionados por el caso de corrupción ‘Palma Arena’.
Este modo de darse de la política basada en eficacia y eficiencia implica la necesaria supervivencia y permanencia en el poder. Las herramientas colusivas para mantenerlo son evidentes. Las redes clientelares, la compra de votos y la promesa de cargos, puestos de trabajo o pingües beneficios son solo instrumentos de estas formaciones y de los individuos que las han perpetrado en su beneficio, porque para que ellos tengas dichas ganancias, sus formaciones han de gobernar. El actual presidente de UM, Josep Melià afirmó hace bien poco en un diario local que “estas prácticas no sólo las ha llevó a cabo Unió Mallorquina, sino que "las han practicado todos los partidos políticos en diversos colectivos, entre ellos, el de los inmigrantes".[7]
La conclusión del presente estudio no puede ser por consiguiente otra. Se ha demostrado que en los Gobiernos Matas-Munar/PP-UM instaurados en el poder la corrupción fue normalizándose. Posiblemente haya casos atribuibles a acciones individuales, pero en la mayoría de entramados han participado grupos en los que los altos cargos figuraban como presuntos participes, entre ellos los presidentes de UM y PP. La tesis moral, insuficiente, sólo se puede explicar con la sistémico-funcional de Hungington o la Perspectiva Funcionalista y los cambios de estructura en la cultura política que establece la tesis de los ‘Políticos de Negocios’ de Isabela Della Porta. La corrupción balear es, por sus características y causas Macro (estructurales y sistémicas) y Micro (individuales, locales o contingentes) de la estructura política, un ejemplo evidente y empírico de los defectos del sistema, pero también de la posibilidad de subsanarlos. La Fiscalía Anticorrupción y los esfuerzos de algunos sectores por mejorar la transparencia y el buen gobierno con leyes que van en este sentido, y las diferentes leyes que se potencian para mejorar el control del sector público y la función pública dan pinceladas de la dirección que se debe tomar, aunque, me temo, las raíces del problema, arraigadas en la propia estructura del capitalismo avanzado y sus exigencias culturales/económicas y ético-morales serán un duro muro de contención para erradicar la que ya es considerado como uno de los mayores problemas sociales por la población. Tal vez debamos preguntarnos si no ha de cambiar algo más que las leyes para poder hacer frente a tal problema.
[2] Estatutos del PP balear la web http://www.ppbalears.es/uploa/1documento_file12_02_05.pdf, artículo 2.
[3] PASTOR VERDÚ, Jaime en http://www.vientosur.info/articulosabiertos/VS108_Pastor_Corrupcion.pdf. El encorchetado es propio.
[4] Huntington, Samuel. Modernization and Development, en Burocratic Corruption in Sub-Saharan Africa:Toward a search for causes and consequences, De. Monday U. Ekpo (Washington D.C.: University Press of America), 1979, pág. 313-324, citado por BADEL RUEDA, Martha Elena en “ARCHIVOS DE MACROECONOMÍA”; Departamento Nacional de Planeación, Unidad de Análisis Macroeconómico en el sitio web:
[6] GÓMEZ CEJUDO, David; en el sitio web: http://poesitivismo.blogspot.com/2010/05/partidos-politicos-grupos-de-presion-y.html
Bibligrafía:
· GÓMEZ CEJUDO, David; en el sitio web:
· HUNTINGTION, Samuel. Modernization and Development, en Burocratic Corruption in Sub-Saharan Africa:Toward a search for causes and consequences, De. Monday U. Ekpo (Washington D.C.: University Press of America), 1979, pág. 313-324, citado por BADEL RUEDA, Martha Elena en “ARCHIVOS DE MACROECONOMÍA”; Departamento Nacional de Planeación, Unidad de Análisis Macroeconómico en el sitio web: www.dnp.gov.co/PortalWeb/Portals/0/archivos/documentos/.../111.pdf
· Estatutos del PP balear la web http://www.ppbalears.es/upload/1documento_file12_02_05.pdf, artículo 2.
· PASTOR VERDÚ, Jaime en:
