-YO-, empezar con pronombre este poema,
desde el ombligo,
mirando la tripa blanca y peluda
fruto de años de pereza.
-Yo-, puro egoísta en mi cabeza
no hay sitio para otros
soy cadena
soy verdugo
soy mi fiesta
-yo-mi culto
mi dios
mi castigo
-yo- mi edema
y miro divertido mis pies y sus falanges
su gracioso movimiento
en vaivén sobre el asfalto
y cada paso
a mi me acerca,
de mi me aleja:
soy acaso -yo- un lenguaje esclavizado al hedonismo?
Solo -yo- soy un -yo mismo-
Solo -yo- soy un -yo mismo-